La situación británica era
desesperante, sabían que la Real Fuerza Aérea Británica "Royal Air
Force" era muy inferior a la Luftwaffe, y apenas contaban con infantería y
fuerzas terrestres después del desastre en la evacuación de Dunkerque. La RAF
para la defensa local quedó al mando del Mariscal Sir Hugh Dowing. Al mismo
tiempo Inglaterra rechazaba una propuesta de paz por Hitler lanzada desde
el Reichstag. Gran Bretaña se preparó para combatir en una lucha suicida. Las
palabras del Primer Ministro británico Winston Churchill mientras los restos
del ejército británico humeaban fueron: "La Batalla de Francia ha
terminado, comienza la Batalla de Inglaterra". A las 13:35 horas del 10 de
Julio de 1940 los aviones de la Luftwaffe iniciaron el ataque en el Canal
de la Mancha, un total de 26 Dorniers Do 17 escoltados por Messerschmitt Bf 109
y Messerschmitt Bf 110 se situaron sobre un convoy marítimo cerca de Dover en
el Golfo de North Foreland. Rápidamente los cazas Spitfire y Hurricane de la
RAF se lanzaron contra las formaciones alemanas. Antes de que todos los cazas
ingleses alcanzaran a los bombarderos, estos dividieron por el cielo en un
combate aéreo, al mismo tiempo los Dornier Do 17 lanzaron sus bombas contra los
barcos. El encuentro aéreo se saldó con 8 aviones alemanes derribados, de estos
7 eran Messerschmitt Bf 109 y un Dornier Do 17; los británicos perdieron 7
aviones, de los cuales 4 eran Spitfire y 3 Hurricane, además de resultar
hundidos un crucero de guerra pesado y cuatro buques mercantes. El resultado
fue una victoria de la Luftwaffe al haber tenido pérdidas similares a la RAF y
haber hundido tantos buques, con ese primer encuentro empezaba la Batalla de
Inglaterra.
Al día siguiente del ataque,
el 11, fue el turno de los Stukas cuando bombardearon las instalaciones de
Portland, al mismo tiempo más Stukas junto a Messerschmitt Bf 110 y Dornier Do
17 atacaron todas las instalaciones de radar británicas que estropearon el
sistema de interceptación durante el día. Poco después de aquellos ataques los
bombarderos Heinkel He 111 soltaron sus mortíferas cargas sobre Southampton, la
isla de Wigh, Portsmouth y Solent, cerca de las bahías y puertos fueron
hundidos numerosos barcos británicos.
Cerca de la costa de Harwich
el 12 de Agosto los Junkers Ju 88 y Stukas de nuevo atacaron a un convoy, el
veloz contraataque de los Spitfire y Hurricanes tomó a los alemanes por
sorpresa, en aquel duelo se pudo ver la inferioridad del Stuka frente a los
cazas. Durante el resto de días de Agosto los bombarderos de la Luftwaffe
bombardearon y castigaron con fuerza todos los puertos del Canal de la Mancha
destruyendo instalaciones, astilleros, diques, barcos, almacenes y todo tipo de
infraestructuras. Al mismo tiempo los cazas alemanes se enfrentaron a los
británicos con ventaja, eso se debía a que la distancia de los aeródromos era
cercana en ambos bandos, pero sin duda la intención de la Luftwaffe durante ese
periodo era atraer a la RAF para evaluar su situación en las futuras
operaciones de invasión a la isla.
El día 08 de Agosto de 1940
se produjo el mayor ataque de Stukas contra convoyes, aunque los Junkers Ju 87
encontraron resistencia de la RAF los cazas Messeschmitt Bf 109 realizaron muy
buena escolta. Ese día decenas de Stukas picaron contra cuatro convoyes diferentes,
fueron hundidos 25 buques mercantes y varios destructores, la victoria de los
Stukas fue arrasante.
Entre el 09 y el 12 de
Agosto la lucha contra Gran Bretaña fue suspendida debido al mal tiempo,
entonces Hitler dio por acabada la campaña contra los convoyes dando prioridad
al bombardeo de las Islas Británicas. Las pérdidas de la Luftwaffe en la lucha
de los convoyes fueron de 192 aviones derribados frente a 77 aparatos de la
RAF, sin embargo varias decenas de buques pertenecientes a convoyes fueron
hundidos, más o menos unos 40 barcos, aquello le costó un alto precio a Gran
Bretaña.
La fase inicial había hecho
ver a la Luftwaffe que el principal objetivo era destruir a la RAF como fuerza
aérea de combate, además en el plan también constaba acabar con su industria
aeronáutica, solo así se podría aplicar la tan esperada Blitzkrieg. La
operación fue denominada Adler Tag o "Águila".
A las 14:00 horas del 13 de
Agosto de 1940 centenares de aviones de la Luftwaffe entre Heinkel He 111,
Messerschmitt Bf 110 y Messerschmitt Bf 190 iniciaron la Operación Adler Tag,
conocido ese momento como el "Día del Águila". Infinitas unidades de
la Luftwaffe aparecieron sobre los cielos de Potland y Southampton donde
atacaron todas sus instalaciones, al mismo tiempo fueron bombardeados los
aeródromos de Eastchurch, Detling y Middle Walop. El ataque en los aeródromos
fue muy efectivo cuando acabaron con muchos aviones de la RAF en el suelo,
también hangares, instalaciones, torres de control y cuarteles fueron destruidos
con las pistas de aterrizaje y despegue dañadas llenas de cráteres. Al final
del Día del Águila la Luftwaffe perdió 46 aparatos en 1.485 salidas que
realizó, mientras que la RAF perdió 13 aviones, aunque salió mal parada del
encuentro debido a que varios de sus aeródromos del Sur habían quedado
inutilizados.
El 14 de Agosto la Luftwaffe
realizó 489 salidas bombardeando aeródromos de la RAF y atacando las zonas
costeras y estaciones de radar. Aquel día Hermann Goering se dio cuenta de que
su Luftwaffe no estaba alcanzando ni mucho menos las expectativas planificadas
contra la RAF.
Por la mañana del 15 los
aviones alemanes bombardearon duramente los aeródromos de Hawkinge y Lympne, al
mismo tiempo 65 Heinkel He 111 procedentes de Noruega atacaron las ciudades de
Newcastle y Sunderland, mientras que 50 Junkers Ju 88 provocaron una gran
destrucción en el aeródromo de Drichfield. Las bajas de la Luftwaffe en el
Norte de Inglaterra fueron de 16 bombarderos y 7 Messerschmitt Bf 110. Al
mediodía la Luftwaffe atacó el aeródromo de Croydon sufriendo graves daños,
mientras que por la noche fueron bombardeadas exitosamente las industrias
militares de Birmingham, Bristol y Southampton. Al final de la noche la
Luftwaffe de Noruega perdió el 75% de sus efectivos, también 80 civiles
murieron por las bombas accidentalmente soltadas sobre las ciudades, aquel día
fue conocido como "Schwarce Donnerstag" o "Jueves Sombrío".
El día 16 de Agosto la
Luftwaffe bombardeó los condados de Kent, Hampshire y Surrey. El 17 las
estaciones radar, industrias aeronáuticas, aeródromos e instalaciones fueron
atacadas por Dornier Do 17, sin embargo antes de completar su misión tuvieron
que retirarse por la fuerte resistencia de los Spitfires y Hurricanes. El peor
día para los alemanes fue el 18 de Agosto cuando la Luftwaffe perdió 61
aparatos y la RAF sólo 7 aviones.
Del 19 al 23 de Agosto los
bombardeos de la Luftwaffe amainaron un poco, aún así las industrias
aeronáuticas y los ataques a convoyes no cesaron. Al final del Adler Tag la
Luftwaffe perdió 403 aviones y la RAF 175 aviones, de los cuales 54 eran
Spitfires y 121 Hurricanes, además murieron 94 pilotos británicos.
Después del Adler Tag a la
Luftwaffe se le acababa el tiempo para iniciar la Operación León Marino antes
del invierno, sus pérdidas eran muy elevadas frente a la RAF, aunque ambas
estaban al máximo de sus fuerzas la Luftwaffe podía dar más. Hitler reunió a
Goering y a sus Generales para hacer una revisión táctica de la estrategia a
seguir, se fijó que exclusivamente se destruyera a la RAF en el aire y en
tierra bombardeando los aeródromos y derribando a sus cazas en el aire, el
resto de objetivos los pilotos tenían que ignorarlos. Por aquel entonces la RAF
no se esperaba ningún ataque de esta magnitud, los aviones que tenían eran
pocos frente a la Luftwaffe y para fastidiar los pilotos con experiencia
escaseaban aún más. A todos los pilotos polacos, franceses y belgas exiliados
se les aportaron aviones de combate Spitfire y Hurricane con los que combatir,
también se escogieron a muchos pilotos de la Commonwealth procedentes de
Canadá, Australia, Nueva Zelanda, Sudáfrica y Rodesia del Sur, los Estados
Unidos enviaron una diminuta formación de pilotos llamada Escuadrón Águila, al
mismo tiempo que se alistaron también un piloto de Jamaica y otro de Palestina.
El 24 de Agosto comenzó la
nueva táctica del bombardeo de los aeródromos, esta vez los bombarderos alemanes
iban escoltados por grandes formaciones de cazas Messerschmitt Bf 109. Cuando
los Spitfires respondieron a los ataques los Messerschmitt Bf 109 cayeron sobre
ellos provocando la desbandada, por lo que los las bombas de los bimotores
consiguieron dañar muy bien los aeródromos de la RAF. Ataques así se sucedieron
durante días.
La noche del 25 de Agosto de
1940 unos 81 bombarderos británicos Wellington bombardearon Berlín, en el
ataque la RAF perdió 5 aviones y los daños a la capital alemana no fueron muy
graves, aunque el susto moral fue muy elevado. Tras el bombardeo Hitler en
persona dio un discurso amenazando a Gran Bretaña con la eliminación de sus
ciudades de la faz de la Tierra.
El último día de Agosto, el
31, la RAF sufrió las pérdidas más elevadas de toda la Batalla de Inglaterra,
ese día los británicos perdieron 39 aparatos y 14 pilotos muertos frente a
pocos alemanes derribados. La tercera fase fue la más dura para la RAF, ya que
estaba luchando al límite de sus fuerzas, además las nuevas de tácticas de
Luftwaffe de concentrar en lugares del radar grandes masas de aviones de
reconocimiento en lugar de bombarderos y ametrallar con cazas las pistas de los
aeródromos mientras los aparatos ingleses estaban en tierra les estaba costando
un precio muy alto. Decenas de aeródromos como Castle Camps, Norholt, Heathrow,
Kenley, Croydon, Duxford, North Weald o Biggim Hill fueron castigados muy
duramente.
Después de varios días de
incesantes combates aéreos, el 06 de Septiembre finalizó la táctica de la
Luftwaffe cuando Goering cambió de parecer al considerar Londres como el primer
objetivo. Las pérdidas de la Luftwaffe fueron de 378 aparatos derribados y 115
averiados, mientras que la RAF tuvo 295 aviones destruidos y 171 averiados, las
bajas de pilotos británicos fueron de 103 muertos y 128 heridos que no estaban
en condiciones de volar. El 07 de Septiembre de 1940 en la ciudad de Londres
sonaron las sirenas cuando los bombarderos de la Luftwaffe empezaron a
sobrevolar la ciudad. Los Heinkel He 111 escoltados por Messerschmitt Bf 109
bombardearon ferozmente el Estuario del Río Támesis y las zonas urbanas de
alrededor, se realizaron un total de 1014 salidas contra Londres. Ese día fue
trágico para Inglaterra porque murieron 490 civiles y fueron heridos otros
1200, centenares de casas fueron derruidas y decenas de fábricas destruidas o
dañadas. Por la noche bombarderos nocturnos Heinkel He 111 y Junkers Ju 88
bombardearon de nuevo la capital realizando 255 salidas en la noche. Entre el
08 y 14 de Septiembre la Luftwaffe siguió castigando la capital británica con
bombardeos diurnos y nocturnos, durante ese periodo los aeródromos de la RAF
dejaron de ser un objetivo, así que los cazas se repusieron de sus fuerzas y
los pilotos heridos curaron sus heridas. Ese fue un error de la Luftwaffe que
le costaría muy caro.
La Luftwaffe volvió a la
carga el día 15 de Septiembre tras varios días de inactividad contra los
aeródromos, lo que había permitido a la RAF reponerse de sus pérdidas. Cuando
centenares de bombarderos alemanes aparecieron sobre Londres, otros centenares
de cazas de la RAF se abalanzaron sobre ellos como águilas cazadoras. La
batalla fue monumental, durante horas cientos de aviones se persiguieron unos
con otros sobre toda la ciudad de Londres bajo las miradas de ánimo de los
civiles, la lucha entre aparatos pasó rozando lugares históricos como la el Big
Ben, la Catedral de St. Paul, el Buckingham Palace o las torres del Bridge
Tower. Desde todas partes de la capital británica se pudo contemplar una de las
pocas bellas visiones de la guerra al verse cientos de aviones de colores en
forma de pájaros revolotear por un cielo muy azul sobre un montón de bellos
monumentos históricos, a pesar del peligro fue algo que los testigos que lo
vivieron no pudieron olvidar. Tras la batalla la Lufwaffe sufrió su mayor
derrota al perder 80 aviones frente a sólo 26 aviones de la RAF derribados.
Durante todo el mes de
Septiembre la Luftwaffe arrasó Londres día y noche. Durante el día la gente que
iba a trabajar tenía que estar atenta a las sirenas por si había que ir a los
refugios, para fastidiar los bombardeos había interrumpido notablemente el
tráfico marítimo de suministros, por lo que las raciones de comida disminuyeron
mucho. La vida para la población de Londres en Octubre se hizo insoportable,
las calles estaban llenas de escombros, los cadáveres de la gente inundaban las
esquinas y constantemente la policía y los bomberos cortaban las avenidas. El
agua se convirtió en un bien muy preciado para las familias al escasear por
toda la ciudad, lo peor eran los toques de queda en los hogares y el ruido de
las bombas al caer por la noche. Millares de personas se trasladaron a vivir en
el metro, allí miles de familias con niños tuvieron que asentarse sin ver la
luz del Sol durante días y rezando para que el techo no se les viniera encima.
Monumentos como el Buckingham Palace o la Catedral de St. Paul fueron
alcanzados por las bombas y dañados con algún que otro incendio, incluso el
Museo Británico tuvo que trasladar piezas valiosas a lugares seguros por miedo
a que se estropearan por los ataques aéreos. La familia real y el Rey Jorge VI
tuvieron que huir a refugios, los miembros del Parlamento, Winston Churchill y
todo su gabinete se reunieron en búnkers bajo el subsuelo desde donde dirigir
la guerra. Gran Bretaña pagó el sufrimiento que ella misma había ocasionado
durante cientos de años, después de varios siglos de naciones enteras
intentando castigarla sin éxito, la Alemania Nacionalsocialista se vengó a ella
misma y a millones de personas de todo el mundo en pasadas centurias. Al
comenzar Octubre de 1940 las bajas aéreas sobre Londres de la Luftwaffe eran
muy elevadas, para evitar más pérdidas de bombarderos durante los ataques
diurnos, Goering recurrió al uso de caza-bombarderos de Messerschmitt Bf 109
equipados con bombas de 250 kilogramos.
Los nuevos caza-bombarderos
Messerschmitt Bf 109 fueron muy difíciles de interceptar por la RAF, sin
embargo el mal adiestramiento de los pilotos en este nuevo campo resultó que el
lanzamiento de bombas se efectuara mal y muchas no alcanzaran los objetivos
previstos en aeródromos e industrias. El ataque con Messerschmitt Bf 110
resultó muy efectivo para objetivos concretos situados en el suelo, hasta ese
momento los alemanes no se dieron cuenta del buen caza-bombardero que era ese
avión.
El 24 de Octubre de 1940
llegó ayuda de Italia en la Batalla de Inglaterra, se le llamó el Corpo Aero
Italiano, estaba compuesto por cazas Fiat G 50 y biplanos Fiat CR 42, los
bombarderos se componían de Fiat BR 20 Cicogna. Ese día la aviación italiana
bombardeó el puerto de Harwik con 18 aviones causándole graves daños, sin
embargo sus aviones eran muy inferiores a los británicos y tres de sus
bombarderos Fiat BR 20 Cicogna se perdieron muriendo 6 pilotos italianos.
Durante el resto de Octubre
la Luftwaffe utilizó otra estrategia de bombardear con pequeñas y rápidas
unidades de Junkers Ju 88 los objetivos, en un principio funcionó, pero la RAF
se dio cuenta de la táctica gracias a los radares. Hasta finales de Octubre los
bombarderos Heinkel He 111 y Dornier Do 17 siguieron bombardeando Londres,
mientras los Messerschmitt Bf 109, Messerschmitt Bf 110 y Stukas atacaban los
aeródromos. El 29 de Octubre la aviación italiana bombardeó Ramsgate siendo
dañados 5 aparatos, aunque no derribados. El 30 la Luftwaffe entró en una
profunda crisis de mandos provocada en parte por culpa de Hermann Goering.
Finalmente el día 31 de Octubre de 1940 Hitler suspendió la Operación León
Marino y los bombardeos diurnos a Gran Bretaña, después de casi cuatro meses la
Batalla de Inglaterra había finalizado. Al amanecer del primer día de Noviembre
la alegría cundió por toda Inglaterra al ver que no venían aviones y al
enterarse de que habían desistido en sus ataques diurnos. Sin embargo por la
noche continuaron los bombardeos a lo largo de gran parte de la Segunda Guerra
Mundial, ya que la RAF no estaba preparada para la guerra nocturna.
La Batalla de Inglaterra fue
el enfrentamiento aéreo más grande de la Historia. Unos pocos pilotos
británicos se opusieron a la victoria de Hitler en su patria, las palabras más
famosas palabras de Winston Churchill fueron: "Jamás en la Historia de los
conflictos, tantos, debieron tanto, a tan pocos".